lunes, 2 de abril de 2012

'Soñando hasta despertar' hace revivir emociones en Pechina

'Soñando hasta despertar' hace revivir emociones en Pechina

Miguel Ferrer contó con una asistencia masiva de vecinos y aficionados a la literatura, a quienes dedicó unos versos.

Presentar un libro tuyo en tu pueblo, con tu gente, con tu familia con tus amigos de siempre... es muy bonito, pero también muy difícil; si además lo haces después de haber padecido, en el último verano complejos problemas de salud, el acto gana muchos enteros, y si a todo lo anterior sumamos la presencia masiva de público en el salón de actos del centro de día, la emotividad de la presentación es total, siendo muchos los momentos en los que el autor no pudo ocultar la emoción que lo embargaba.





Eso fue lo que ocurrió con la presentación del libro de poemas Soñando hasta despertar de Miguel Ferrer Carmona, en el que, contrariamente a lo que suele suceder en este tipo de actos, la firma de ejemplares precedió al acto de presentación y se extendió a los largo de unos 45 minutos, lo que da una idea de los muchos ejemplares adquiridos por el público de un género literario que, como afirmaba el editor, suele ser minoritario en ventas.

Abrió la alcaldesa de la localidad, María de los Ángeles Morales, agradeciendo a Miguel elegir Pechina para presentar su libro aprovechando también para destacar la presencia masiva de público relacionando algunos aspectos de la poesía de Miguel Ferrer y los valores que representa; Seguidamente el editor Juan Grima explicó su vinculación con Pechina, para pasar a exaltar los valores de la poesía de Miguel, su vinculación con el trovo y con el ilustre pechineros Trovero Castillo y las razones por la que, sin dudar, publicó una obra, que calificó como poesía "de la de siempre", insistiendo en que esta cualidad es muy difícil de encontrar hoy día.

El prologuista de libro, compañero de docencia en el IES de Pechina y amigo personal del protagonista, intentó, sin comentar el prólogo, justificar su vena literaria como algo genético de la familia del autor, por lo que leyó un poema de la madre de Miguel, creado hace muchos años.

Finalizada la presentación Miguel Ferrer fue llamando a dos chicos y dos chicas que representaban a los centros educativos de la localidad, los cuales recitaron, cada uno, un poema del libro; seguidamente, le tocó el turno a varios voluntarios, como la poetisa, Manoli Pino o Juan Montesinos, que leyeron, textos suyos o del libro.

Finalmente Miguel Ferrer recitó unos 4 ó 5 poemas, leyó el prólogo y repentizó unos versos dedicados a algunas mujeres presentes, por lo que, Desirée, una amiga argentina del autor, deleitó al público cantando a capela la canción que inmortalizó Alberto Cortéz, Gracias a la vida.

Semejante espectáculo literario no podía sino terminar con una fuerte ovación a los participantes que en todo momento resaltaron su satisfacción por encontrarse en el acto, que acogió a muchos vecinos de Pechina pero también amantes de la poesía y de la literatura.